Se ha demostrado que más del 90% de todos los plásticos liberan aditivos cuando se calientan. No existe una temperatura segura, ya que las sustancias del plástico pueden liberarse incluso con un calentamiento mínimo. También se ha demostrado que la grasa facilita que el plástico libere sustancias que pueden ser alteradores hormonales para los seres humanos. Por lo tanto, se debe evitar usar plástico en la cocina. De lo contrario, corremos el riesgo de que los productos químicos nocivos terminen en los alimentos que comemos y en las bebidas que consumimos. Si ingerimos estas sustancias, pueden causarnos problemas y conducir a problemas de salud más adelante en la vida.Pero no te desanimes. Existen otros materiales que se sabe con certeza que no liberan partículas y que, por lo tanto, puedes usar con confianza en su lugar. Entre los materiales seguros se incluyen el acero inoxidable, el vidrio, la porcelana, la madera sin tratar y el bambú macizo. Se dice a menudo que la fibra de bambú es un material bueno y no tóxico, pero puede contener aditivos como plástico y melamina que pueden desprenderse. (A veces el bambú puede ser adecuado, pero en muchos casos también contiene aditivos que se liberan. Por eso es importante asegurarte de que los productos de bambú que utilizas no contengan aditivos nocivos.) Todo el bambú que se vende aquí en Glimja es macizo y seguro de usar porque no contiene ningún aditivo nocivo.
Reemplazar
Ejemplos de productos que deberías reemplazar si están hechos de plástico: platos, tazas, jarras, cuencos y boles, tablas de cortar, utensilios como espátulas y cucharones, recipientes para alimentos, biberones, botellas y hervidores de agua. Las sartenes de teflón y los moldes para gratinar/hornear con el llamado recubrimiento antiadherente contienen sustancias conocidas como compuestos perfluorados que deberías evitar. Elige en su lugar una sartén de hierro fundido o acero inoxidable. Así que cuando sea el momento de reemplazar la sartén en casa, opta por una de un material más seguro en tu próxima compra. Las sartenes tanto de hierro fundido como de acero inoxidable duran toda la vida si las cuidas correctamente y nunca más tendrás que comprar una nueva.
Envases de alimentos
Las latas de conserva y los tubos metálicos donde se almacenan alimentos (por ejemplo, caviar, queso untable, puré de tomate) tienen un revestimiento plástico en el interior que contiene la sustancia disruptora endocrina Bisfenol A (BPA). Esta sustancia se libera hacia los alimentos o productos almacenados en el recipiente, y cuanto más graso sea el alimento, más sustancias liberará. Por lo tanto, evita los alimentos envasados en latas de conserva y tubos metálicos, y elige materiales más seguros como el tetrapack o alimentos congelados en cartón. Desde 2015, algunas empresas han optado por sustituir el plástico que contiene BPA en sus latas de conserva, así que si el envase indica que está libre de Bisfenol, entonces es adecuado.
El grifo de agua
Se ha demostrado que muchos grifos de agua liberan metales pesados como plomo y cobre al agua que luego utilizamos como agua potable y para cocinar. Para evitar ingerir estos elementos, es una buena idea dejar correr el agua del grifo un poco más, especialmente por la mañana, cuando el agua ha permanecido estancada durante la noche. Deja correr el agua durante 30-45 segundos por la mañana, y 10-15 segundos durante el día, así obtendrás agua más limpia y evitarás ingerir estas sustancias cuando bebas el agua o la uses para cocinar.
La comida que consumes
Además de evitar el plástico en la cocina, una de las cosas más importantes que puedes hacer para reducir la exposición a químicos nocivos es elegir alimentos ecológicos y sin aditivos cuando compres tus alimentos. Esto es especialmente importante cuando se trata de frutas y verduras, ya que las frutas y verduras convencionales están expuestas a altos niveles de fumigación. Al elegir productos ecológicos, has dado un paso grande e importante hacia la reducción de químicos nocivos en tu vida diaria.
Artículo original escrito por Sara Mårtensson, fundadora de Lapland Eco Store que desde 2021 es parte de Glimja.
