¿Tienes el cabello seco? ¿Quizás tienes picazón o el cuero cabelludo graso? ¿Empeora durante el otoño y el invierno? Entonces un tratamiento de aceite puede ayudarte.
DIY: Haz tu propio tratamiento de aceite
Comienza eligiendo un aceite. Los aceites más conocidos para el cabello son, por ejemplo, aceite de argán, aceite de jojoba, aceite de coco, aceite de almendras, aceite de ricino, aceite de sésamo, aceite de rosa mosqueta y aceite de aguacate. Menos conocidos son los africanos como el baobab, el aceite de marula y el aceite de moringa, el aceite de camelia, el aceite de zanahoria, el aceite de comino negro y el aceite de macadamia. Pero todos funcionan bien como aceites capilares.
Aplica el aceite directamente en el cuero cabelludo y el cabello o solamente en el cuero cabelludo.
Espera 30 minutos.
Lava el cabello con un champú y acondicionador suave y natural.
DIY: Tratamiento de aceite caliente
También es fácil hacer tu propio tratamiento capilar caliente, es muy beneficioso y agradable.
Calienta el aceite de tu elección a fuego lento y aplícalo en el cabello (no demasiado caliente) tanto en el cuero cabelludo como hasta las puntas.
Espera 30 minutos.
Lava el cabello con un champú y acondicionador suave y natural.
DIY: Mezcla tu propio aceite capilar con diferentes hierbas, aromas y aceites
Añade 3 cucharadas de aceite en una cacerola.
Puedes elegir un tipo de aceite base o hacer una mezcla con, por ejemplo, 1 cucharada de jojoba, 1 cucharada de coco y 1 cucharada de aceite de ricino.
Vierte los aceites en una cacerola, ponla a fuego lento y añade 1 cucharada de las hierbas de tu elección (ver lista a continuación).
Deja reposar durante unos 30 minutos a fuego muy lento, removiendo con frecuencia.
Añade más aceites o aromas esenciales (ver lista a continuación).
Luego, cuela el aceite en un pequeño recipiente de vidrio usando, por ejemplo, un filtro de café o un colador de malla fina.
Puedes almacenar el aceite hasta tres meses en un frasco o tarro de vidrio herméticamente cerrado.
Añade aceites y aromas
3-5 gotas de aceite esencial como romero, lavanda, árbol de té o menta. Los aceites esenciales tienen diferentes cualidades y pueden, por ejemplo, ayudar a calmar la picazón del cuero cabelludo.
1 cucharadita de aceite de rosa mosqueta – reduce la caída del cabello e hidrata.
1 cucharadita de aceite de zanahoria – estimula el crecimiento del cabello.
1 cucharadita de aceite de comino negro – reduce la caída del cabello e hidrata.
1 cucharadita de aloe vera – hidrata.
1 cucharadita de aceite de neem – bueno para combatir la caspa y la picazón.
Añade hierbas (secas o extractos)
Para fortalecer el cabello: manzanilla, ortiga, cola de caballo o bardana.
Para limpiar el cabello (por ejemplo, para problemas del cuero cabelludo): romero, perejil, salvia o hamamelis.
Para estimular el crecimiento del cabello: menta, perejil, salvia, manzanilla, jengibre o canela.
Adecuado para la mayoría: caléndula, manzanilla, lavanda u hojas de rosa secas.