¿Te preguntas a veces cómo puedes manejar el estrés y/o la ansiedad de la mejor manera? Aquí compartimos cómo trabajamos para reducir los problemas relacionados con el estrés y crear más energía y calma en su lugar.
¿Qué es realmente el estrés?
El estrés y la ansiedad pueden describirse de muchas maneras diferentes en el lenguaje cotidiano; puede estar relacionado con situaciones económicas, de salud, relaciones, trabajo u otras. Pero ¿sabías que la reacción del cuerpo al estrés es la misma en todos estos casos? Nuestra "respuesta de lucha o huida" es un sistema de seguridad incorporado que libera hormonas e impulsos nerviosos que nos preparan para manejar un peligro inmediato. El cuerpo y la mente están en máxima alerta y enfocados en acciones poderosas que nos sacarán del peligro – o lo neutralizarán.Es una respuesta saludable y vital para poder manejar accidentes o amenazas físicas inmediatas. El problema surge cuando nosotros, como la mayoría de las personas modernas, mantenemos un cierto nivel de esta respuesta de lucha o huida durante períodos prolongados. Quizás nos preocupamos por lo que otros piensen de nosotros, por si nosotros o alguien que amamos enfermamos, por si no tenemos suficiente dinero, etc. Nuestros cuerpos están simultáneamente expuestos al estrés físico a través de, entre otras cosas, contaminantes ambientales y aditivos artificiales en los alimentos. Puede ser fácil creer que el nivel de estrés con el que vivimos es "normal", pero con el tiempo conduce a una larga serie de efectos negativos tanto para el cuerpo como para la mente.
El cuerpo tiene un sistema incorporado para manejar el estrés
Todo el tiempo que no estamos en peligro inminente, estamos diseñados para estar en un estado más relajado y equilibrado. Existe una respuesta opuesta incorporada en nosotros que algunos investigadores han sugerido llamar nuestro "sistema de calma y tranquilidad". Este se activa, entre otras cosas, por la cercanía con otras personas, los masajes y el contacto físico, los entornos naturales hermosos, así como por el yoga, la meditación y los ejercicios de respiración. Cuando este sistema está activo, se liberan hormonas e impulsos nerviosos que le dicen al cuerpo que podemos relajarnos, desarrollar músculos, fortalecer el sistema inmunológico y nervioso; que podemos recuperarnos y permitirnos ser más creativos.Si hemos estado expuestos al estrés prolongado de diferentes maneras (lo cual es prácticamente inevitable si vivimos en una sociedad moderna), necesitamos "reinstalar" conscientemente nuestro sistema de calma y tranquilidad. Simplemente debemos acostumbrar a nuestros cuerpos a este estado para recuperar la calma, la energía y la claridad. Aquí presentamos algunas de las mejores estrategias para lograrlo:
5 formas de activar el sistema de calma y tranquilidad del cuerpo
1. Equilibrio mental
Hoy en día, gran parte del estrés que experimentamos tiene sus raíces en los patrones de pensamiento que aprendemos desde la infancia. Hay mucho que ganar al tomar conciencia de estos patrones y examinar por nosotros mismos qué es verdadero para nosotros y qué crea bienestar y progreso en nuestras vidas. Existen muchos métodos para conseguirlo.
2. Contacto físico y cercanía
La cercanía con otras personas en general y el contacto físico afectuoso en particular son una de las formas más rápidas y efectivas de comunicarle al cuerpo que el "sistema de calma y tranquilidad" puede tomar el control y que podemos relajarnos. En partes de Asia es muy común que dentro de la familia se den masajes regularmente. ¿Quizás podríamos hacer que esto sea una parte más importante de nuestras vidas aquí también?
3. Ejercicios de respiración
Otra manera muy efectiva de reajustar la brújula del cuerpo es a través de la respiración consciente. También es una excelente manera de aumentar nuestra capacidad pulmonar y fortalecer nuestro sistema inmunológico. Un ejercicio muy simple pero efectivo con el que todos pueden empezar es tomar diez respiraciones profundas de la siguiente manera: Inhala y cuenta hasta 5, mantén la respiración y cuenta hasta 10, exhala y cuenta hasta 10. Si tienes menor o mayor capacidad pulmonar, puedes ajustar el ejercicio para que se adapte a ti. Cuenta, por ejemplo, hasta 3-6-6 o 10-20-20 en su lugar.
4. Estar en la naturaleza
Estar en un entorno natural y simplemente estar presente por un momento. ¿Recuerdas la última vez que lo hiciste? Si no, deja que esto sea un recordatorio y programa un momento para ti mismo en el bosque, en una montaña o en una playa ahora mismo. Es increíblemente restaurador y equilibrante estar en un entorno que no exige nada de nosotros, preferiblemente un rato cada día. En la naturaleza no hay nada que leer, que considerar o que intentar resolver – nos señala que simplemente estemos presentes, lo que reduce nuestra presión arterial, apoya nuestro sistema inmunológico y activa automáticamente nuestro sistema de calma y tranquilidad.
5. Hierbas / Adaptógenos
Para ayudarnos, también tenemos una serie de hierbas fantásticas en la clase de adaptógenos. Un adaptógeno es una hierba o planta que ayuda al cuerpo a manejar el estrés y a encontrar más rápidamente su equilibrio y salud natural. Para nosotros aquí en la oficina, estos son indispensables y tratamos de consumir al menos un adaptógeno cada día. Te invitamos a explorar aquí entre nuestros excelentes adaptógenos.