Aquí tienes algunas recetas sencillas que fortalecen el sistema inmunológico con frutas y verduras que son comunes en los hogares suecos y supermercados. Perfecto cuando no quieres o no puedes ir a la tienda.
Boost verde de vitamina C
2 porciones
– 1 aguacate maduro
– 3 kiwis maduros
– 1 bolsa de espinacas frescas
– Agua
Corta la fruta, pon todo en una batidora, cubre con agua y mezcla hasta obtener una súper bebida verde.
Ensalada mixta con aderezo sencillo
Reúne las verduras que tengas en casa y que te apetezca comer. Usa preferiblemente una base de algún tipo de hojas verdes. Los brotes también son un ingrediente excelente. Corta las verduras en láminas finas. Las zanahorias, repollo blanco, calabacín, hinojo, etc. se pueden cortar ventajosamente con un rebanador de queso o pelador de patatas para conseguir una textura fina y crujiente. Añade frutas o bayas como manzana, arándanos rojos o arándanos azules si te gusta un poco de dulzor en tu ensalada. Mezcla todo en un bol grande.
Bate un aderezo compuesto por aceite de oliva, zumo de limón o vinagre de sidra de manzana, miel, sal y hierbas aromáticas – frescas, congeladas o secas. Usa lo que tengas en casa. La clave para un buen aderezo es incluir al menos tres de los cinco sabores: salado, ácido, dulce, amargo y umami. Los ingredientes sencillos de arriba lo consiguen de una manera muy fácil. Deja fluir la imaginación y experimenta hasta encontrar tus favoritos.
Rocía el aderezo sobre la ensalada y sirve. ¡Sencillo, delicioso y saludable!
Verduras en el horno de forma sencilla
Esto se ha convertido en uno de nuestros favoritos en casa este invierno. Es sencillo, delicioso y generalmente funciona con lo que tenemos en casa sin necesidad de planificarlo con antelación.
Reúne algunas verduras y tubérculos del frigorífico y la despensa. Como base puede ser bueno usar algo rico en almidón como patatas, calabaza, boniato o remolacha. Añade verduras como pimiento, berenjena, calabacín, cebolla, tomates, hinojo, col puntiaguda u otras que tengas en casa. Corta todo en trozos o gajos de tamaño adecuado.Las patatas necesitan hervirse antes. La mayoría de las otras verduras no lo necesitan.
Coloca todo en una bandeja grande. Rocía con un poco de aceite (el aceite de coco es probablemente el mejor para el calentamiento desde el punto de vista de la salud) y especias. Algunas de nuestras especias favoritas son ajo, pimienta negra, sal de hierbas, romero, tomillo, orégano, estragón, o por qué no un buen curry.
Hornea en el horno a 225°C durante 20-40 minutos dependiendo del tipo y tamaño de las verduras. Manténlas bajo observación y comprueba con un tenedor si no estás seguro. Están listas cuando están tiernas en el centro y han conseguido una superficie dorada bonita.
¡Sirve preferiblemente con ensalada, judías o hummus!