El otoño se acerca y para la mayoría esto significa que el trabajo o los estudios se reactivan. Esperemos que hayas tenido tiempo de relajarte durante el verano y recargar las pilas. Entonces, ¿cómo puedes aprovechar esto y conseguir un comienzo del otoño que haga que la energía te dure?
Apuesta por enmarcar tu día a día con una rutina que te dé mucha energía con movimiento, nutrición y recuperación.
Arranca con una rutina matutina placentera
Pon el despertador temprano, pero permítete despertar lentamente para que el cuerpo pueda mantener la calma.
Despierta el cuerpo
Comienza bebiendo un vaso de agua tibia con limón y luego siéntate cómodamente y medita un rato o haz ejercicios de respiración profunda. Termina con un agradable stretching, yoga, cepillado en seco o una ducha fría. Esto despierta y pone en marcha la circulación y los sistemas del cuerpo, por ejemplo el sistema linfático y la desintoxicación natural del cuerpo.
Despierta el cerebro
Entonces es hora de despertar el cerebro. Prepara una taza de té Lion's mane y toma tus suplementos potenciadores del cerebro. Siéntate y lee un libro que sea estimulante y activador. Puede estar relacionado con tu trabajo o estudios y aumentar la motivación. Si no quieres leer un libro, también puedes activar el cerebro aprendiendo nuevas palabras en un idioma extranjero, adquiriendo nuevos conocimientos, resolviendo sudokus, haciendo entrenamiento de memoria o cualquier otra cosa que te guste.
Desayuno
Luego es hora de prepararse para el día. Si no practicas ayuno intermitente, puedes preparar un supersmoothie o cocinar avena con superberries y especias antiinflamatorias y tomar tus suplementos. Ahora también puedes beber tu taza de café, si quieres una por la mañana. Mejóralo con un chorrito de aceite C8. Si quieres obtener un impulso extra a través del café, puedes usar el café instantáneo de Four Sigmatic que contiene cordyceps y chaga.
Arranca tu día
Activa el trabajo o los estudios empezando primero por hacer una lista de tareas de lo que vas a hacer durante el día. No la hagas demasiado larga. Pon algunos pocos puntos que debes hacer y el resto deben ser puntos que harás si tienes tiempo. Luego empiezas a trabajar. Toma descansos con estiramientos de piernas durante al menos cinco minutos cada hora. Entonces puedes aprovechar y beber un vaso de agua que mantiene el cerebro en forma.
Pausa del almuerzo y tarde
En relación con el almuerzo es bueno si puedes dar un paseo para tomar un poco de aire fresco o tal vez hacer un poco de yoga o stretching. ¿Quizás incluso tienes la oportunidad de hacer una sesión de entrenamiento? Come luego comida que mantenga el azúcar en sangre estable. La tarde continúa en el mismo espíritu que la mañana. Un tentempié nutritivo y quizás una segunda taza de café de hongos pueden sentar bien. Antes de que termine el día repasas la lista de tareas que escribiste por la mañana. Evalúa qué ha ido bien y qué necesitas hacer o mejorar mañana.Toma algunas respiraciones profundas y termina el trabajo/estudios del día.
Tiempo libre
Come una cena nutritiva y toma tus suplementos de la tarde. Llena luego el tiempo libre con cosas que te gustan. Entrenamiento, tiempo con la familia y los amigos, descanso, ver programas de humor u otras cosas que te gusten, dar un paseo, hacer manualidades, hablar con alguien y tomar tiempo para ti mismo y con tu pareja. Relájate escribiendo en un diario de gratitud o al menos reflexiona sobre aquello por lo que estás agradecido del día. Termina luego leyendo un libro que sea relajante, preferiblemente literatura de ficción. Acuéstate temprano para conseguir 7-8 horas de sueño.
Sé flexible
Por supuesto no necesitas seguir todo al pie de la letra de esta manera. ¡Crea un horario que funcione para ti! Lo que tu horario debe darte es energía para trabajar o estudiar eficientemente y ganas de estar con la familia y el tiempo libre. Algunas cosas que pueden facilitar el sueño y ayudarte a dormir bien son no tener TV, ordenador, teléfono u otra tecnología en el dormitorio.
Fin de semana placentero
Los fines de semana no necesitas seguir tu horario. Apuesta por la recuperación y pasa tiempo con la familia y los amigos. Disfruta de dormir hasta tarde, pero mantén preferiblemente la hora de acostarte y levantarte máximo 1,5 horas más tarde de lo habitual. Deja que el programa sea relativamente sin planificar, pero mantén comidas regulares. Haz tus ejercicios de respiración cada día y entrena si te apetece. ¡Ahora estás listo para el otoño!