Cuando se trata de la salud y el bienestar uno de los pilares más importantes es tener un hígado sano. El hígado es el segundo órgano más grande del cuerpo y cumple cientos de tareas importantes en el organismo a diario en el organismo. Entre otras cosas, asegura una nutrición adecuada, desintoxica la sangre, y equilibra el nivel de azúcar para que te puedas sentir con ánimo y energía.
El mal funcionamiento del hígado afecta muchísimo a la salud y puede dar varios síntomas reconocibles como cansancio, alergias, náuseas y confusión mental. Por suerte hay muchas maneras de ayudar al hígado. A continuación te presentaciones algunas de las cosas más importantes que puedes hacer y que tienen un mayor efecto:
Agua con limón
Tomar un vaso grande de agua pura con un poco de limón recién exprimido o lima en cuanto te levantas por la mañana es una de las maneras más sencillas de apoyar el correcto funcionamiento del hígado. El agua limpia el sistema interno después de la noche y el limón o la lima hace que el agua pueda absorberse más fácilmente y esté «viva» para hidratar las células y restaurar su equilibrio.
Ejercicio físico
Transpirar y hacer que la sangre circule bien es quizás la forma más eficaz de descargar el funcionamiento del hígado. Con el ejercicio físico el cuerpo elimina toxinas a través de la piel y los pulmones, al mismo tiempo que la sangre circula por todos los tejidos y depura el cuerpo y aumenta la absorción de los nutrientes. Lo que le da posibilidad al hígado de ocuparse de otras funciones importantes.
Hábitos alimenticios
La alimentación es fundamental para el bienestar del hígado. Los alimentos pesados y procesados, el azúcar blanco, las grasas baratas y los aditivos como los saborizantes y edulcorantes sobrecargan al hígado. Los alimentos beneficiosos para el hígado son las frutas y verduras, las bayas, las algas, los aguacates, germinados, hierbas frescas como el jengibre, el cilantro y la albahaca.
Zumos verdes
Si quieres darle un refuerzo extra al hígado te recomendamos tomar un zumo verde en ayunas cada mañana. El zumo de apio puro es bueno, pero también el zumo de pepino, manzana, hinojo, clorofila y limón y jengibre.
Hierbas para el hígado
Hay muchas hierbas beneficiosas para el hígado. Entre las hierbas y plantas estrellas podemos encontrar: raíz de diente de león, melisa, cúrcuma, chaga, reishi, cardo mariano, acederón, bardana, chancapiedra y menta. Se pueden comprar en diferentes formatos: tintura madre de la planta medicinal, mezclas y preparados (como, por ejemplo, el suplemento Livatrex) o hierbas deshidratadas para hacer tisanas. Para apoyar el buen funcionamiento del hígado hay que intentar consumir, por lo menos, una o dos de esas plantas medicinales al día.
Suplementos y superalimentos para el hígado
Los nutrientes que mejor apoyan el funcionamiento del hígado son: la vitamina C y B12, el zinc, seleno y magnesio, el glutatión y CoQ10. Entre los superalimentos más beneficiosos para el hígado se encuentran la cebada, la hierba de trigo, la espirulina y las algas AFA. También hay buenas mezclas especiales para el hígado como p.ej. el producto Zeotrex / Zeoliter de la marca Global Healing que ayuda en la desintoxicación de los metales pesados y apoyan la actividad hepática.
Ayuno/ Desintoxicación
Tener periodos en los que solamente consumimos alimentos puros o hacemos ayuno y nos nutrimos con zumos y hierbas es una de las mejores cosas que podemos hacer para darle tiempo al hígado de «limpiarse» y regenerarse.
Hay muchas curas y filosofías diferentes para depurarse. En nuestra experiencia lo más importante es hacerlo con cuidado y encontrar la solución que mejor nos funcione a nosotros. Las curas desintoxicantes extremas, donde se pasa hambre o hay náuseas no suelen ser las más recomendadas porque podrían ser más contraproducentes que otra cosa, ya que liberan toxinas de golpe y esto ejerce mucha presión para el cuerpo y la mente.
Esperamos que esta breve guía te haya servido de ayuda. ¡No dudes en consultarnos si no sabes qué producto podría ser el más adecuado para ti!